I want to live like common people

Saturday, March 04, 2006

Welcome to my world

Me estaré haciendo cada vez más vieja cada vez más rápido, o es sólo que estoy en pleno PMS y por eso las ganas de mandar todo y a todos a la mierda?

A veces se me ocurre que ya me jodí, que estoy más cerca de convertirme en esa vieja amargada en la que no me quiero convertir que de lo otro: del por fin sacudirme (terminar de sacudirme? comenzar a sacudirme?) de todo ello que me molesta, me fastidia, me enerva, me saca de mis casillas, me entristece, me borra la sonrisa, me arruga, me sube la presión, me baja la presión, me causa dolor de estómago, hambre, insomnio, cansancio, somnolencia, pesadillas, sueño ligero, sueño pesado, estrés y escuatro.

Y entonces los mando, te mando (si, a TI) a la mierda. Sin miramientos (o con demasiados miramientos). Y entonces me mando a mí misma, vete a volar, so estúpida, ya no te aguanto más.

Y en algún momento, entre las ganas y el punto exacto de la ejecución, me doy cuenta de todo. Pero ya es muy tarde. Ya te mandé, pues. Ya te fuiste—a regañadientes, pero te fuiste—a la mierda, y tú y todos están felices en la mierda y yo me siento igualmente alienada y extraña y rarísima e incomprensible, y a la vez tan ligera….

You look like... a perfect fit,
For a girl in need... of eternal care
But can you save me?
Come on and save me...
If you could save me,
From the ranks of the freaks,
Who suspect they could never love anyone.

'Cause I can tell... you know what it's like
A long farewell... of the hunger strike.

Ya pues, dale…

Dale, pero cuando lo logres, te odiaré. Te odiaré por haberme cambiado, por quitarme mi esencia, por arrancarme lo que es mío, lo que soy yo, sin lo que no soy, yo, ni nadie. Quién te has creído que eres para dejarme sin mi Cortázar en la Noche boca arriba, sin mi Borges en El Inmortal… eh???

At your own risk. The doors of my world are open, for those who dare trespassing.

Saturday, December 24, 2005

Mis Hadas Madrinas

En un mundo en el que la fantasía va de la mano con el skunk (thanks hon), en una vida donde consumimos el cinismo antes del desayuno... cuando ya la ilusión de la Navidad parecía ser sólo cosa de niños (ricos)...

Anoche, out of the blue, contra todo pronóstico, y finalmente dandole fin a un karma horroroso que me acompañó por CASI SEIS MESES..... me cogí a alguiennnnnnnnnnn!!!!!!!!!!!!!!!!

Y, por que este post se llama como se llama, quiero dedicárselo a mis cuatro Hadas Madrinas.

He estado pensando la forma de darles un nombre a cada una... tipo las brujas buenas/malas del norte/sur/etc.. pero ya veo a todas menos una(la bruja mala del Oriente) peléándose por ser "la bruja buena del norte"... así que se jodieron, nada de nombres cursis esta vez.

Cuando alguna de ellas se digne en enseñarme cómo subir fotos....

Gracias, mis queridas hadas, por TODO. Primero, por alegrarse por mi. Segundo, por alentarme (indescriptibles, los "thumbs up", los abrazos, los "you go girl!!", los besos con lengua ??). Tercero, por estar ahi conmigo para compartir ese momento de triunfo: "me viene a buscar en 15 minutos", por que me hubiera vuelto loca de no haberlos tenido ustedes que me chequeaban el makeup, el peinado, que las tetas estuvieran en su sitio, y bueno, que me hacían sentir tan sexy con tanto toqueteo.

Si, pues... mis hadas se ponen un poco pervertidas a veces y se soban conmigo, me dan besos con lengua, pero igual las (les) quiero.

Así inauguro la segunda temporada de este blog, y espero ahora poder morirme de la angustia de cosas más interesantes y emocionantes... un peligro de STD, que no me vino el periodo, que tengo a dos fulanos en mi cama, etc.

Salud, feliz navidad. Para mi. Bah, y tambien para ustedes.. hoy me siento generosa.

PD: betcha wanna know how it was...

Friday, December 02, 2005

La delgada línea amarilla (1)

Parte uno: de cómo, cuándo y dónde trazarla. De las posibilidades de borrarla.

Dónde ponemos el límite de lo que está permitido y lo que no? Dónde empieza lo que entendemos como “inmoral”? Será justo donde termina lo “moral” o habrá un área definida de superposición – área de amortiguación, le dicen – en el mapa? Hay un mapa? Quién mierda lo tiene? Quién se lo dio? Por qué yo no tengo una copia???? Quién fue el cojudo que le garabateó encima???

Cómo será la cosa… todos somos buenos hasta que nos volvemos malos? O es que todos somos malos hasta que una suficiente cantidad de gente se crea la mentira de que no lo somos?

Realmente habrá gente que se levante por la mañana, se mire al espejo y se diga “soy malo”?

No es como que parte de nuestra naturaleza (estúpida) creernos buenísimos fuera de dudas, que la culpa la tienen todos los demás siempre y en particular cuando nosotros la cagamos?

Si bien todos parecemos tener una ética –si no de hierro, por lo menos de un plástico muy resistente— y reaccionamos con ferviente desaprobación contra cualquier amago de “inmoralidad” de los otros, creo que estamos tan metidos en nuestra burbuja de dobles estándares, que nuestras bien aprendidas técnicas de autoengaño nos tienen totalmente a ciegas ante nuestras propias transgresiones.

Lo más natural es hablar de la experiencia propia, pero lo más cómodo es criticar la metida de pata ajena. No debería resultar difícil tomar decisiones cuando están cargadas de un componente ético. Si está “mal” pues no va y ya. ¿No?

Ahí tal vez esté precisamente, pues, la esencia del problema. El meollo del asunto. La carne del raviol. La uva-pasa del bombón. La… basta.

El cómo, cuándo y por qué definimos lo que “está mal” marca nuestro futuro y tiñe nuestras relaciones personales, y es aparentemente lo que al fin y al cabo nos define como personas.

Los filósofos han perdido años, pelo y en tantos casos la cordura en su afán de dar con una definición de lo que es “el bien” que le satisfaga a todos. Los teólogos la tienen más fácil, pero soy más atea que el carajo, así que me uno al sufrimiento de los otros barbudos.

La cosa andaba jodida de lo mal que la pasaban estos pobres barbudos tratando de jugar con la fórmula a ver si les salía algo “one size fits all”. Andaban cochinos, sin dientes, pobres, socially outcast, todos moribundos de esa enfermedad tan fea y tan lenta que es que nadie te comprenda. Algunos tuvieron que tomar veneno, a otros les robaron sus ideas los teólogos, otros perdieron los papeles y se lanzaron por un barranco y otros se tiraron a tanta puta que les vino una sífilis de las bíblicas (existe eso, o me lo acabo de inventar??? yupiii)

La cosa es que un día ocurrió lo inesperado, y ese viejo refrán de “todo depende del color del cristal con que se mira” se puso de moda de la forma más vanguardista. Se acuñó El Relativismo (hace siglos que andaba por ahí… pero un vivo lo patentó). Y como en esta cuestión de barbudos—así como en todo lo demás en este “supermercado de Dios”—se tiende a la especialización, alguien por ahí decidió meterse a quemar neurona y parió el Relativismo Moral (los hay de varios sabores: etiológico, cognitivo, etc, etc)

A grandes rasgos y de una forma muuuuuuuuuuuy general, el Relativismo moral pone en evidencia la existencia de una “diversidad moral” y nos explica que la verdad o falsedad de los juicios o justificaciones morales son relativos al marco de una sociedad (con sus tradiciones, convicciones y taradeces) y no son “absolutos” (no hay una sola “verdad”).

(o al menos así es como yo lo he entendido... Ja!)

El relativismo, como toda teoría, atrae hacia sí una fauna a mi punto de ver bastante definible y diferenciable. Por un lado tienes a todos aquellos que se leen el libro “yo viajé a Ganímedes” o ven “E.T.” y quedan totalmente convencidos de que hay aliens entre nosotros. Estas entrañables personas, a las que podemos cariñosamente etiquetar de “pelotudos que se creen todo lo que les cuentan” se lo pasan re-mal. Un día se atiborran de brócoli por que ayuda a no tener cáncer de colon. Al otro día se aguantan como pueden las ganas de ir al baño en un avión por miedo a que les pique una araña… Envían un e-mail a mil novecientas personas para que se unan a ellos y a otros tres mil cojudos en contra del desgraciado e inhumano que mete gatitos bebé en botellas y luego tiene el descaro de venderlos como decoración—y carísimos. Estas personas viven realmente al límite. Ya me puedo imaginar la reacción de alguno, que por allá en los años setenta tuvo la mala suerte de toparse con un artículo acerca del relativismo mientras tan tranquilo esperaba para su cita con el dentista… ("por qué no agarré el Selecciones, como siempre????")

Otro grupo de curiosos son los populares “comodines”, que tienen la ética más fusiforme que una ameba, que venderían a su madre por entradas VIP a la disco de moda, que serían capaces de embarazarse tres veces con tal de conseguir-y no soltar-marido. Los comodines morales se dan golpes de pecho los días pares del mes y durante los impares se cojen a la esposa de su hermano, desvían dinero de la empresa a su cuenta personal, chocan y se dan a la fuga, planean venganzas sangrientas contra sus enemigos, desconfían de todo el mundo (claro, pues…) y reúnen evidencia incriminatoria sobre amigos, familiares, jefes, subordinados, y el papa, for a rainy day. Ah, eso sí, descansan los domingos como buenos cristianos. Cómo no les habrá caído a pelo el relativismo a estos personajes… aunque no esperes que ninguno lo diga en voz alta (va en contra de todo lo que pregonan los otros barbudos uniformados que viven en una parte de Italia que no se llama Italia)

El último grupo diferenciable somos todos los otros tarados que andamos por el mundo habiendo leído acerca del Relativismo, habiendo preguntado a propios y ajenos, y, como siempre, no sabiendo muy bien qué carajos pensar al respecto.

El otro 80% de la población mundial nunca ha oído hablar de ello. Así como yo ni tú ni tu noviecito que lee tanto hemos oído hablar de taaaaaaaaaaaaantas otras cosas.

Bueno, chau. Es relativamente tarde, es Viernes (al menos aquí en Sudaca-américa), y creo que me hará bien salir a tomarme algo con mis amigos (o tal vez me vaya al infierno… ).

Disclaimer: filósofos: no me quieran pegar por mis inconsistencias históricas o mi terriblemente subjetiva forma de ver el mundo. Ustedes son igualitos. Preventivamente: jódanse todos.

Tuesday, November 29, 2005

Sexismo por los cuatro costados

Cómo ahuyentar un hombre en dos horas

Imagínate una cita con un chico nuevo… él está buenísimo, huele riquísimo, tiene un super puesto en una corporación internacional, está 100% comprobado que NO ES GAY, no le está poniendo los cuernos a su esposa por que NO está casado, y encima de todo… te ha invitado a salir.

Ahora imagínate que esa cita es lo último que vas a saber de él. Aquí el detalle.

Disclaimer: Estos son sólo tips y, aunque su eficacia haya sido comprobada en la práctica, no se les puede conferir carácter de “regla” o “infalibles”

  1. Haz comentarios acerca de política, actualidad, y /o autos.
  2. Demuéstrale que eres más inteligente que él.
  3. Rápidamente déjale saber que estás buscando una relación seria.
  4. Pregúntale qué piensa sobre temas como el aborto, la manipulación genética o la extinción de especies en la selva amazónica.
  5. Deja claro que odias el fútbol, que su equipo favorito es una buena mierda sin los jugadores extranjeros, y que te importa tres rábanos qué carro tiene.
  6. No te rías de sus chistes malos, machistas o racistas.
  7. Mantén el contacto visual mientras él está desesperadamente tratando de eludir una de tus preguntas.
  8. Re-pregunta.
  9. Opina sobre su respuesta.
  10. Cómete toda tu comida.

Y si ninguno de los anteriores tips lo ha logrado…. Sé tu misma. No falla.

Sunday, November 27, 2005

Mi madre me había advertido sobre esto – or – never drink and dial

Es domingo por la noche. Domingos. Días especialmente productivos, si lo que se trata es de producir un trasero más grande gracias a estados de inactividad que queman menos calorías que el dormir, mayor daño celular por exposición prolongada al tubo de rayos catódicos, cansancio de tanto no hacer nada y un guilt trip de aquellos… que sólo puede ser mitigado (y sólo parcialmente) al comer porquerías, hacer zapping compulsivo y mantener mi mente alejada de.. en qué estaba pensando?

Mi Mozilla Firefox se rehusó a funcionar hoy y casi me da un paro cardiaco triple. Pero bueno, clickeé un poco al azar por aquí y por allá y revivió. Uff… talk about withdrawal syndrome.
Así que ahora celebro mi pequeño e inusitado triunfo sobre la tecnología, tomando una copa, de una botella de vino que abrí el martes pasado, y que prácticamente vacié yo solita mientras, lágrimas corren, escribía uno de los e-mails más lindos, desgarrados y patéticamente honestos de toda mi vida.

Mi madre tenía razón, una vez más, al decirme que eso de tomar solo es un pésimo hábito. Y procedo a dar mis razones (que no tienen nada que ver con el passive-aggressive repressive speech de mi mami):
1) tomar acompañada SIEMPRE será más divertido. Y si tienes los amigos que yo tengo, sabrías que siempre es mejor ayudar a otros a vomitar que lo opuesto. Luego te quedan semanas de anécdotas y burlas… para todo lo demás está Mastercard.
2) Aun sabiendo que el riesgo de sufrir un OD de algún tipo es mínimo, siempre queda el peligro de botar la copa, vaso o botella sobre el teclado de la laptop y morir achicharrada por electrocución. Y aún si sobreviviese, jamás podría reponerme a la pérdida de mi “bebé”.
3) Amar es compartir. “qué bueeeeeeeeeeeno está este vino” casi nunca me lleva a “me lo tomaré yo solita por que todos los demás son unworthy de este preciado brebaje”. En general es todo lo contrario.
4) Si la botella de vino no se acaba, lo que queda se echa a perder en poco tiempo, y da rabia tener que usar algo tan rico en la salsa bolognesa de los spaghetti de la próxima semana.
5) La segunda botella es gratis. Reciprocidad, que le llaman. “Oye, idiota, yo compré el vino la vez pasada… ahora te toca a ti”.
6) Si a algunas personas se les debe quitar las llaves del auto para que no se estrellen o las pierdan, a mí deberían quitarme el celular y/o mantenerme alejada de una PC con internet. Los resultados pueden ser catastróficos.

Y bueno, aquel martes en cuestión… there was no parental control available.

To know more about Drunk dialing.
Le pasa hasta a los mejores.

Entrada triunfal

Afuera: ruido sordo. Hay gente ahí, ¿esperando? Nahh...
Adentro: nerviosismo comprensible. “qué irá a pasar”. Sudo más de la cuenta. Me doy cuenta. Es peor. Sé que es peor. Puta madre, esto no acaba nunca.

Welcome to this guilt tripper's blog. Don't say I didn't warn you.